La entrega a domicilio de alimentos también hace furor en la península y se confirma en 2019 como el primer segmento del mercado online con una facturación de 566 millones de euros, 56% más que el año anterior. Los datos surgen de la B2C E-commerce Observatory del Politécnico de Milán y de Netcomm, el Consorcio Italiano de Comercio Electrónico.
Un verdadero auge en un servicio presente en el 93% de las ciudades con más de 50 mil habitantes, que continúa avanzando entre los italianos, quizás sin que tengan tanta conciencia de la expansión. A nivel psicológico, de hecho, hay varias razones por las cuales las personas piden la cena online, dicen los entendidos.
Es que no sólo la falta de tiempo para comprar, la conveniencia de organizar una cena con amigos y la pereza inevitable de cocinar, sino que en algunos casos puede ser una trampa peligrosa que ayuda a aislarse y ocultar otros problemas, retrasando la hora de pedir ayuda.
"Un abrazo al que es difícil escapar", explica Angela De Marco, psiquiatra experta en conducta alimentaria, entrevistada por ANSA. "El alimento a casa es una importante conquista del tiempo y los sabores que pueden convertirse en un atajo para no enfrentarse a los fantasmas propios", deslizó.