Mientras el mundo sigue expectante y temeroso el avance del coronavirus, Brasil, Paraguay, Colombia, Honduras y otros países de la región están azotados por una epidemia de dengue que ha dejado cientos de muertos y miles de enfermos. "Desde mayo del año pasado estamos en epidemia de dengue en Colombia", afirmó Iván Darío González, ministro de Salud colombiano. La dimensión de la enfermedad es tal que en 2019 se registraron un total de 129 mil casos, de los cuales 96 tuvieron un desenlace falta. Mientras que en lo que va corrido de este año el Ministerio de Salud ha contabilizado 12 mil casos. Al menos 26 personas infectadas con el virus murieron y se estudia si los decesos estuvieron relacionados con la enfermedad.
El ministro González dijo que en estos momentos la epidemia se encuentra en su última etapa y confió que con el paso de las semanas bajará el número de personas infectadas, aunque recordó que se trata de una enfermedad con casos recurrentes. Explicó que el dengue tiene "picos altos" de contagiados cada tres años y aseguró que el momento actual es producto de la sequía. A finales del año pasado, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) aseguró que el dengue en las Américas alcanzó el "mayor número de casos registrados en la historia" con 2,7 millones de enfermos. De ese total, se registraron 1.206 muertes, según el reporte elaborado por la OPS hasta octubre.
Esta semana, la Secretaría de Salud Pública de Honduras confirmó que durante enero se presentaron un total de 4.268 casos de dengue y la muerte de cinco personas. Mientras que el Ministerio de Salud de Brasil reportó 30.763 casos de personas infectadas con la enfermedad en el arranque de este año. En Paraguay las autoridades de salud informaron que en el despertar de 2020 se registraron un total de 35.801 casos, cuatro de los cuales desembocaron en la muerte de los pacientes.
El dengue es una enfermedad causada por la picadura del mosquito Aedes Aegypti, propio de zonas tórridas por debajo de los 2.200 metros de altura sobre el nivel del mar. Sus síntomas son similares a los de un gripe con fiebre, dolores musculares y de cabeza, diarrea y vómitos, y en casos extremos los pacientes sufren de hemorragias. Según el Ministro de Salud colombiano, la temporada seca por la que atraviesa la región contribuye a la reproducción del mosquito que transmite la enfermedad, puesto que la gente se ve obligada a recoger y almacenar agua limpia, y es en ese ambiente donde el zancudo deposita sus huevos