El coronavirus permanece en las superficies mucho más tiempo del que se pensaba, de acuerdo a la conclusión a la que llegaron los expertos de salud tras los rastros encontrados en las cabinas del crucero Diamond Princess. Los hallaron 17 días después de que fuera vaciado, lo que genera un nuevo enfoque y cierta alarma. Hasta ahora se pensaba que el virus mortal vivía entre dos y tres días en algunas superficies, pero de acuerdo al nuevo informe de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés), dura al menos cinco veces más. El coronavirus "fue identificado en una variedad de superficies en cabinas de pasajeros infectados sintomáticos y asintomáticos hasta 17 días después de que fueron desocupadas en el Diamond Princess, pero antes de que se llevaran a cabo los procedimientos de desinfección", se lee en el el informe semanal de mortalidad de los CDC.
Sin embargo, el informe enfatizó que la investigación "no se puede utilizar para determinar si la transmisión se produjo desde superficies contaminadas" y que los rastros fueron lo suficientemente activos como "para enfermar a alguien". El alarmante descubrimiento se produjo en un estudio sobre la propagación del virus en los cruceros, y los CDC pidieron que se continuara estudiando los barcos. "Durante las etapas iniciales de la pandemia de covid-19, el Diamond Princess fue el escenario del brote más grande fuera de China continental", se destaca en el informe de los CDC. Más de 700 de los 3.700 pasajeros y la tripulación del barco luego dieron positivo por el coronavirus, según el estudio.
A pesar de las advertencias de los especialistas, las imágenes de las fiestas que se organizan en botes anclados en la bahía de Vizcaya, en Miami, Florida, en plena pandemia del coronavirus y cuando los casos aumentan en Florida a un ritmo de 100 o más por día, colmó la paciencia de las autoridades. El alcalde del Condado Miami Dade, Carlos Giménez, prohibió el sábado pasado el "rafting", que consiste en amarrar unos barcos a otros para que se pueda pasar con facilidad de uno a otro, y horas más tarde anunció el cierre de todas las marinas y las rampas para bajar botes al mar en su jurisdicción, con efecto inmediato.
Solo podrán usar esas instalaciones los barcos dedicados a la pesca que abastecen a tiendas y restaurantes. La policía de Miami Dade patrullará desde el agua para evitar reuniones de barcos, informó hoy El Nuevo Herald. "Estoy decepcionado por las fotos y videos que hay en las redes sociales de barcos anclados cerca unos a otros y concentraciones de grandes grupos de personas", expresó Giménez en un comunicado. Aunque en Miami Dade no está en vigor una cuarentena obligatoria, hoteles, bares, restaurantes y otros lugares de reunión están cerrados y solo permanecen abiertos establecimientos comerciales que venden productos de primera necesidad.