MONTEVIDEO (Uypress)- El Poder Ejecutivo estableció que quienes se vayan a vacunar contra el Covid-19 deberán firmar "un consentimiento informado": en los países que se aplica se deja constancia de que las vacunas, como todo medicamento, "podrían causar efectos adversos".
La decisión del Ejecutivo les fue notificada este martes a los integrantes de la comisión que asesora al Ministerio de Salud Pública (MSP) sobre cómo deberá ser la campaña, y tomó por sorpresa a los médicos y científicos que la integran, ya que hace "más de medio año" habían sugerido que no se firmara un consentimiento.
Según informa El País, que consultó a 4 integrantes de la comisión asesora, todos coincidieron: no están en contra del consentimiento informado -de hecho, dicen que es una garantía para el usuario y el Estado, más aún en vacunas que fueron aprobadas para su uso en una situación de emergencia-, pero entienden que la firma del formulario podría desestimular la adhesión a vacunarse. En especial entre la población más dubitativa.
Como es de público conocimiento, las vacunas de Pfizer/BioNTech se conservan a muy bajas temperaturas. Una vez descongeladas, comienza una cuenta regresiva hasta que la dosis pierde su utilidad. "¿Qué pasa si una persona ya tiene agenda para una vacuna y a la hora de firmar el consentimiento se arrepiente? Eso cambia la proyección", afirma uno de los técnicos consultados.
Los ejemplos de Israel, Argentina y México, que no la piden, y de EE.UU, Reino Unido y Puerto Rico, que sí - En Israel, donde según el sitio Our World In Data se lleva vacunado al 58% de la población, si falta alguien se puede anotar cualquier ciudadano. Allí la vacuna es también voluntaria, pero no se requiere de un consentimiento informado para recibirla. La excepción son los menores de 18 años que requieren de la firma de los padres (las vacunas se administran a mayores de 16 y ahora se autorizó a niños con alguna comorbilidad específica).
Argentina y México tampoco exigen la firma de un consentimiento. En Puerto Rico, parte de Estados Unidos y Reino Unido sí se pide que se complete un formulario. Los británicos son bastante discretos y piden se firme una hoja en la que se aclara que "todo medicamento puede traer efectos" y se indica el enlace web para obtener más información. Los puertorriqueños, en cambio, son más duros: "Al firmar certifico que he sido orientado(a) sobre la Ley HIPAA, he recibido copia de la hoja de Información de la vacuna (VIS), he leído la información de la vacuna y he tenido la oportunidad de hacer preguntas. Estoy satisfecho(a) con las respuestas a mis preguntas, he entendido los beneficios y riesgos de la vacuna. Autorizo la administración de la vacuna".