Una presentación judicial ante la Corte Suprema para anular el balotaje presidencial, marchas no permitidas en respaldo de los candidatos Keiko Fujimori y Pedro Castillo y el clamor de ex mandos militares que piden desconocer al líder de izquierda si vence es la tensa escenografía política de Perú, mientras se siguen analizan los reparos a votos de la segunda vuelta.
El abogado y exmagistrado Javier Villa Stein presentó ante la Corte Suprema de Justicia un recurso de amparo de los derechos constitucionales para declarar la nulidad de la segunda vuelta de las elecciones celebradas el pasado 6 de junio.
El balotaje entre Castillo (Perú Libre) y su rival Keiko Fujimori (Fuerza Popular) aún está sin definición, por los numerosos pedidos de nulidad de votos presentados fundamentalmente por la candidata, que están en estudio de las autoridades electorales.
Villa Stein -otrora presidente de la Corte- subraya que a su juicio se trató de "un proceso electoral empañado por diversos hechos que cuestionan el respeto a la voluntad del pueblo, erosionan la opinión pública y restan credibilidad a los propios votos".
"Esta situación -argumenta- requiere que, de acuerdo con los altos principios democráticos consagrados en nuestra Constitución (...) y tratados internacionales (...), la Corte Suprema de Justicia declare nulas y sin valor las elecciones para que un nuevo proceso electoral de indiscutible legalidad y legitimidad se puede organizar".
La mínima victoria de Castillo por unos 44.800 votos, o sea el 0,25% del total, aún no ha sido formalizado por el Tribunal Nacional Electoral, que sigue examinando numerosos recursos interpuestos por el partido Fuerza Popular.
En tanto, este sábado Lima será el centro de manifestaciones de diferentes organizaciones de los partidos Castillo y Fujimori.
Los militantes del líder de la izquierda se concentrarán en la plaza San Martín. Mientras que los de la hija del expresidente Alberto Fujimori -preso por crímenes y corrupción- se reunirán con una hora de diferencia, en la Alameda 28 de Julio.
Ante esto, Violeta Bermúdez, la jefa del Gabinete Ministerial, instó a que no se generen aglomeraciones con la organización de manifestaciones políticas, pues el país aún enfrenta la pandemia de la Covid-19 y estos eventos no están permitidos y no cuentan con ningún tipo de garantía.
"En primer lugar es importante recordar que estamos en estado de emergencia. En realidad no hay garantía para ningún tipo de manifestación ni reunión pública. No debería convocarse a ninguna marcha, estamos en pandemia", dijo la funcionaria entrevistada por la emisora RPP.
Y puso como ejemplo la ciudad de Chota en Cajamarca, donde se realizó un debate presidencial, que luego del encuentro pasó al nivel más alto de alerta sanitaria.
"Cuando se producen situaciones de aglomeración, sin los cuidados necesarios, sin el distanciamiento físico entre personas, el nivel de contagio se incrementa. Entonces no deberíamos estar convocando a este tipo de reuniones", añadió Bermúdez.
En tanto, anoche, el presidente Francisco Sagasti cuestionó a los antiguos mandos de las Fuerzas Armadas que pidieron no reconocer a Castillo como presidente en caso de oficializarse su victoria electoral.
El mandatario en ejercicio exigió la "neutralidad" de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional y anunció que se investigará cualquier intento de socavar el orden constitucional.
Lo advirtió un día después de que se conociera una carta de antiguos altos cargos de la institución castrense animando a no reconocer al nuevo jefe del Estado.
Sagasti reveló que pidió a la ministra de Defensa, Nuria Esparch, "coordinar el envío de estas cartas" a la Fiscalía para que "realice las investigaciones necesarias" y determine "posibles conductas lesivas al orden constitucional" y en ese caso "establezca las respectivas responsabilidades".
"Lo que es inaceptable es que un grupo de personas retiradas de las Fuerzas Armadas pretenda incitar a los altos mandos del Ejército, la Marina y la Fuerza Aérea para que quebranten el Estado de derecho", afirmó Sagasti.
"Como presidente Constitucional de la República, rechazo este tipo de comunicaciones que no solo son contrarios a los valores y a la institucionalidad democrática, sino también son actos reñidos con la Constitución y las leyes", subrayó. Y recalcó que tanto las Fuerzas Armadas como la Policía Nacional "son neutrales y no deliberantes".