El nuevo film de Wes Anderson, "The French Dispatch", que reúne pequeñas historias de la redacción de un diario, surgidas tras la muerte de su director, fue exhibida en concurso en el Festival de Cannes.
Con algunas excepciones, Anderson siempre hace la misma película: es inevitable. Esta vez incluso va más allá de sí mismo y llena esta obra con sus postales cómicas, en las que los personajes son poco más que títeres en un teatro de papel maché.
En esta película, el director pudo jugar con una cantidad impresionante de actores: Benicio del Toro, Francesc McDormand, Jeffrey Wright, Adrien Brody, Tilda Swinton, Owen Wilson, Timothée Chalamet, Mathieu Amalric, Willem Dafoe, Edward Norton, Liev Schreiber y muchos otros, entre ellos, Léa Seydoux, que interpreta "a una mujer de múltiples capas".
Se trata de "una carta de amor a los periodistas, ambientada en un puesto de avanzada de un periódico estadounidense en una ciudad francesa ficticia del siglo XX", describió Anderson.
Agregó que "no es una historia fácil de comprender" pero habla de un periodista estadounidense radicado en Francia, que crea una revista.
"De todos modos, no es un film sobre la libertad de prensa, pero cuando se habla de reporteros, también se habla de lo que sucede en el mundo real", aclaró.
La película da cuenta de pequeñas historias de la relación de este medio, que salen a la luz en ocasión de la muerte del director de la publicación (interpretado por Bill Murray). Es una colección de relatos publicados en la homónima The French Dispatch, ambientada en la ficticia ciudad francesa de Ennui-sur-Blasé.
El film está inspirado en el amor de Anderson por el New Yorker y algunos personajes y eventos están basados en hechos reales.
Una de las tramas está centrada en las protestas de la ocupación estudiantil del mayo francés, inspirada en el artículo de Mavis Gallant "The events in May: A Paris Notebook", mientras que otra historia, tal vez la más impactante, con el personaje de Julien Cadazio (Adrien Brody), se basa en "The days of Duveen", editado por el New Yorker, sobre el mercader de arte Lord Duveen.
Entre los descubrimientos de este comerciante, está el de un artista psicópata (Benicio Del Toro) que trabaja desde la cárcel en medio de muchas dificultades y trucos.
En "The French Dispatch", y no podía ser de otro modo, también está la mirada estadounidense, un poco paternalista e indulgente, sobre la "extraña Europa".
En el súper elenco está incluida la francesa Léa Seydoux que, como resultó positiva al Covid-19, tuvo que anular su presencia en el festival del que es reina, con más de cuatro películas en la programación.
En declaraciones a Deadline, la actriz dijo que en la película interpreta a Simone, "una guardia carcelera muy severa que deviene la musa inspiradora del artista preso Moses Rosenthaler (Del Toro)".
Agregó que "si bien Simone es muy estricta como guardia, se deleita con la libertad que siente al posar desnuda para las pinturas abstractas del artista".
"La mía no es una parte muy importante - dijo- si bien la propia naturaleza de 'The French Dispatch', con su mosaico de historias y estrellas, significa que ninguna parte lo es".
"De todo modos, Simone es un concentrado de todo. Es divertida, muy divertida; profunda, muy fría, pero también muy emotiva. En síntesis, tiene muchas capas", concluyó.