La moderación se impuso en las primarias presidenciales en Chile al ganar el candidato independiente Sebastián Sichel, en el bloque de derecha Chile Vamos, y el diputado frenteamplista Gabriel Boric, en la coalición de izquierda Apruebo Dignidad.
Con una mayor participación a lo proyectado inicialmente e incluso debiéndose a ampliar el horario, cerraron las mesas receptoras de sufragios donde ambos bloques elegían entre seis candidatos a su representante de cara a los comicios presidenciales de noviembre.
Con el 46,07% de las mesas escrutadas, en el bloque de derecha, el independiente Sebastián Sichel obtenía el 48,64% mientras Lavín llegaba al 32,06%. Más atrás se ubicaban Mario Desbordes, de Renovación Nacional, con el 10.65% y cuarto, el exministro de Hacienda y militante de Evopoli, Ignacio Briones, 8,64%.
Con este resultado, Briones reconoció su derrota y anunció que iba al comando de Sichel a felicitarlo por su triunfo.
Minutos después lo hizo Lavín, quien admitió que había sido muy difícil hacer campaña con este gobierno cuya popularidad apenas alcanza los dos dígitos.
En Apruebo Dignidad, el diputado Boric obtenía un aplastante 60,33% mientras el comunista Daniel Jadue, llegaba a 39,67%.
Boric, diputado del Frente Amplio y representante de la austral región de Magallanes, enfocó su discurso en convocar a una amplia mayoría para hacer los cambios económicos, sociales y políticos que den una mayor igualdad en Chile.
Fue el único representante de su partido que firmó el Acuerdo de Paz del 15 de noviembre de 2019 que bajo la intensidad de las movilizaciones de la revuelta que sacudieron al país al plantear un Plebiscito para cambiar la Constitución heredada de la dictadura militar. Sebastián Sichel (43), abogado, independiente y exministro de Desarrollo Social, apuntó al voto moderado de centro enfatizando que era necesario realizar cambios que den una mayor igualdad dentro de la sociedad chilena.
Lavín (67), economista de la Universidad de Chicago, militante de la pinochetista Unión Demócrata Independiente (UDI), y miembro del Opus Dei, aseguraba que era el único que podía "parar al comunismo", pero apenas logró imponerse en la comuna de Las Condes, de la que fue alcalde hasta hace pocos meses. En la otra vereda, y aunque favorito hasta hace una semana, su carácter y discurso duro por cambios profundos le habría jugado en contra al alcalde comunista Daniel Jadue (54).
Arquitecto y sociólogo de la Universidad de Chile, Magister en Urbanismo y Viviendas Sociales, exdirigente del Frente Popular por la Liberación de Palestina, nieto de inmigrantes palestinos.
Como alcalde de la popular comuna de Recoleta demostró que se podía mover el cerco y pensar en un modelo económico distinto al neoliberal vigente tras el golpe militar de 1973.