MONTEVIDEO (Uypress) – Juan Castillo, actual secretario general del Partido Comunista, fue el más votado para el Comité Central en el congreso realizado el pasado fin de semana. Óscar Andrade quedó en tercer lugar, y el dirigente Daniel Marsiglia no entró entre los 60 titulares y quedó relegado a la lista de suplentes.
"El XXXII Congreso del PCU fue una expresión de la democracia partidaria que sintetizó un período de aguda lucha de clases en el mundo, en el continente y en nuestro país y trazó perspectivas inmediatas y de largo plazo, tácticas y estratégicas, para contribuir a la lucha de nuestro pueblo para resolver a su favor las contradicciones planteadas", comienza expresando la declaración política dada a conocer este domingo 29, al finalizar el encuentro de los comunistas, que eligió un nuevo comité central integrado por 60 miembros: 31 hombres y 29 mujeres.
Por segunda vez consecutiva, Juan Castillo fue el candidato más votado para integrar el órgano de dirección partidaria, y se da por descontado que será reelegido para el cargo de secretario general. Laura Alberti, secretaria de finanzas del SUNCA, fue la segunda más votada, y en tercer lugar quedó Óscar Andrade, que intentará reforzar su aspiración a ser precandidato presidencial o, si son ciertos los rumores que circulan en corrillos, de llegarse a un acuerdo con el MPP para apoyar a Yamandú Orsi, concurrir como candidato a la Intendencia de Canelones.
"Realizamos nuestro Congreso en el marco de la crisis orgánica y estructural del capitalismo. El capital busca hacer recaer los costos de esa crisis en los pueblos. Esto se expresó brutalmente cuando en medio de la pandemia y de su salida, se multiplicaron los mil millonarios y las ganancias de las trasnacionales, mientras millones de personas cayeron en la pobreza y enfrentan el hambre. El imperialismo, forma concreta de existencia del capitalismo, ha demostrado su incapacidad para resolver los problemas de la humanidad: se agrava la crisis económica, hay peligros de nuevas crisis financieras, se agravan la crisis ambiental, el hambre, la pobreza y la desigualdad", dice más adelante la declaración política, que, en referencia a la actual situación nacional, manifiesta que "hoy están claros, cada vez más, los dos proyectos de país: de un lado el que expresa al bloque histórico, político y social, democrático y radical de los cambios, el de las grandes mayorías nacionales; con desarrollo productivo, inclusión social, distribución de la riqueza, defensa de la soberanía y profundización democrática. Del otro lado, el de las clases dominantes, que nos gobiernan, el de los malla de oro, con ajuste neoliberal, represión y recortes, concentración del poder y la riqueza y más dependencia. Hoy la contradicción sigue siendo en entre la oligarquía y el pueblo".