La dueña de la casa estuvo internada durante 25 días y en ese tiempo, los animales estuvieron dentro de la casa sin ningún tipo de comida.Jessica Schöph, del grupo Catitos, explicó que cuando llegaron a la casa: “lamentablemente se estaban comiendo unos a otros, una situación espantosa”.La dueña de los animales ya tenía una denuncia y las ONGs se han hecho cargo de la mayoría de las mascotas: Bastet tiene seis gatos y Catitos, siete. Desgraciadamente uno de ellos murió a las horas de ser rescatado.
Las protectoras afirman que la mayoría de los gatos que actualmente estaban bajo la tenencia de la mujer no estaban castrados.