BUENOS AIRES (Xinhua) - La Organización Panamericana de la Salud (OPS) advirtió que la región de las Américas está "bajo presión" al enfrentar cuatro emergencias de salud pública, que son el reciente brote de cólera en Haití, los casos de viruela símica, las continuas infecciones por COVID-19 y las bajas tasas de vacunación contra la poliomielitis.
La directora del organismo, Carissa Etienne, advirtió que esos cuatro factores "aumentan la necesidad de prepararse para las emergencias de salud en la región de las Américas".
"Nuestra región está bajo presión", afirmó Etienne durante una conferencia de prensa virtual, y urgió a los países de la región a "trabajar rápidamente con las herramientas que tenemos a mano para controlar estas cuatro emergencias de salud que se están produciendo en las Américas"
La funcionaria de la OPS subrayó que "las emergencias de salud paralelas y los frágiles entornos sociales, políticos y naturales ilustran la importancia de invertir en los sistemas de salud y fortalecerlos".
La OPS recordó que después de más de tres años, Haití reportó la semana pasada un brote de cólera justo cuando el país estaba a punto de ser declarado libre de esa enfermedad.
Hasta el 9 de octubre las autoridades nacionales confirmaron 32 casos y 18 muertes, así como más de 260 casos sospechosos en los alrededores de la capital, Puerto Príncipe.
Etienne añadió que es probable que los casos sean mucho más altos que las cifras reportadas, dado que la escalada de violencia callejera y la actividad criminal limitan el acceso y la movilidad en las zonas afectadas.
En cuanto a la viruela símica, dijo que en las Américas se han registrado más de 45.000 casos, lo que representa el 63 por ciento del total mundial.
La OPS sostuvo que aunque la propagación del virus parece estar disminuyendo, la semana pasada se notificaron más de 2.300 nuevos casos de viruela símica en la región, la mayoría en Estados Unidos, pero también cientos en Brasil, Colombia y México.
"Sabemos cómo seguirle los pasos a esta enfermedad. Sabemos quiénes corren más riesgo. Y sabemos cómo mantener a las personas a salvo de la infección", subrayó la directora de la OPS, e instó a los países a utilizar estos conocimientos para reducir los casos y terminar con la transmisión.
Por otra parte, afirmó que la tendencia a la baja de la COVID-19 en el mundo, incluso en las Américas, muestra que "podemos estar pasando de la fase aguda de la pandemia a una fase de control sostenido", pero advirtió que esto sólo será posible con la continuación de las pruebas y el aumento de la vacunación.
La semana pasada, las Américas registraron 178.000 nuevos casos de COVID-19, y aunque más del 70 por ciento de la población de América Latina y el Caribe están ya completamente vacunadas contra la enfermedad, muchos países siguen sin alcanzar ese objetivo, y diez países y territorios de la región aún no han llegado al 40 por ciento, según la organización.
Igualmente hizo un nuevo llamado a actuar contra la poliomielitis, aumentando la cobertura de vacunación y la vigilancia. Etienne indicó que cuatro países de la región, Brasil, Haití, Perú y República Dominicana, están en "muy alto riesgo" de experimentar un brote, y otros ocho se consideran de "alto riesgo".
La OPS subrayó que la poliomielitis, una enfermedad para la que no existe cura ni tratamiento, debe quedar en el pasado. "Con vacunas eficaces y décadas de experiencia en inmunización, tenemos el poder de mantenerla a raya", aseveró Etienne.