"Vamos a dejar de farandulizar la política, vamos a ser serios en esto", afirmó el secretario de la Presidencia, sin que se supiera hacia dónde iba la acusación de "farandulizar".
Lo cierto es que, según denunció días atrás el portal Sudestada, con la firma de Delgado se autorizó, en plena pandemia y cuando las fronteras estaban cerradas, el ingreso por "razones de necesidad impostergable y de carácter urgente, que se entienden justificadas" del médico argentino.
Delgado contraatacó argumentando que Uruguay "manejó con absoluta transparencia la pandemia". Dijo que las causales de estos ingresos que fueron autorizados con su firma fueron excepciones como ser la ramificación familiar, temas de salud, razones comerciales y de negocios, además de los deportistas que llegaron al país.
"El procedimiento era que venía la solicitud -si estaba dentro de la casuística establecida- Migraciones miraba que el pasaporte estuviera habilitado y también se evaluaba si estaban dadas las condiciones sanitarias y luego venía a Presidencia. Lo que hacíamos simplemente era habilitar una solicitud", argumentó el secretario de Presidencia.
Dijo que el profesional venía por razones comerciales, "por un tema de una franquicia de una empresa multinacional", repitiendo lo que el médico afirmó en una carta pública divulgada por el periodista Leo Sarro.
"En ese marco, vino y se lo habilitó con los recaudos sanitarios", aseguró Delgado. "No tiene nada que ver con la intervención que se hizo el presidente, coincide con la clínica. Ahora que coincida con la clínica, me parece que es muy rebuscado querer pegarle al presidente por esa vía", dijo.