GINEBRA - Los niños son los usuarios "más vulnerables" del mundo digital y necesitan una "protección especial". Así lo afirmó hoy el Representante Permanente de Italia ante las Naciones Unidas y otras Organizaciones Internacionales en Ginebra, Embajador Vincenzo Grassi.
Hablando en el contexto del Diálogo Interactivo con la Representante Especial del Secretario General de las Naciones Unidas sobre la violencia contra los niños, Najat Maalla M'jid, en el marco de la 52 sesión del Consejo de Derechos Humanos, el embajador reiteró que la promoción de los derechos del niño constituye una prioridad tradicional de la acción de Italia tanto a nivel nacional como internacional.
"Nos comprometemos a prevenir y combatir todas las formas de violencia y abuso contra ellos, incluidas las nuevas formas que surgen en el ámbito digital", remarcó el Representante Permanente de Italia.
Italia descubrió que los riesgos en línea están aumentando a un ritmo preocupante, desde el ciberacoso hasta el discurso de odio, el abuso sexual o las violaciones de la privacidad, y que los niños son los usuarios más vulnerables y expuestos a tales peligros, agregó Grassi.
El diplomático italiano también llamó la atención sobre la cuestión de la continuidad entre la violencia online y offline destacada en el informe presentado por el Representante Especial de la ONU.
Por lo tanto, subrayó Grassi, los niños necesitan una protección especial en el entorno digital y deben ser conscientes de los riesgos potenciales, y recordó que Italia publicó el año pasado una versión traducida, junto con una adaptada a los niños, de la Observación General n. 25 del Comité de los Derechos del Niño de la ONU dedicada a los "Derechos de los niños en relación con el entorno digital".
Finalmente, destacó la importancia de que los estados miembros de la ONU cumplan la promesa hecha a través de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible para poner fin a todas las formas de violencia contra los niños. "Debemos acelerar los esfuerzos para no dejar a ningún niño detrás", concluyó el embajador Grassi.