El embajador italiano en Brasil, Alessandro Cortese, concluyó su visita de tres días al estado meridional de Rio Grande do Sul donde profundizó la comprensión de una importante realidad económica del país sudamericano, la de la ciudad de Caxias do Sul.
Acompañado por el cónsul general de Italia en Porto Alegre, Valerio Caruso, y del cónsul honorario de Caxias do Sul, Gelson Castellan, Cortese participó en el encuentro "Business Italia-Brasil: oportunidades y desafíos", organizado por el grupo de líderes empresariales LIDE en la Cámara de la Industria, Comercio y Servicio de Caixas.
Según el embajador, el momento es propicio para expandir las relaciones comerciales entre los dos países.
"Los 150 años de la inmigración italiana son ya un óptimo motivo para reforzar las relaciones. Asimismo, Brasil detenta la presidencia del G20, por ello, este año se prevé que al menos 15 ministros italianos visiten el país. Creo que aquí existen grandes perspectivas para las empresas italianas", recalcó el diplomático al reunirse con los empresarios.
Cortese también visitó la Universidad de Caxias do Sul, donde fue recibido por el rector Gelson Rech quien, además de resaltar las relaciones académicas y el intercambio de estudiantes y profesores que la universidad mantiene con seis instituciones italianas, anunció la estipulación de un acuerdo con la Universidad de Siena. A continuación, Cortese visitó la planta de grafeno más grande de América Latina instalada por una universidad.
Antes de concluir su misión, el embajador participó de un almuerzo con representantes de la comunidad italiana de Rio Grande do Sul.