MONTEVIDEO (Uypress)- Los economistas Mauricio De Rosa y Andrea Vigorito, del Instituto de Economía de la Facultad de Ciencias Económicas de la UdelaR, señalaron que el 95% de la población uruguaya ha experimentado una pérdida de ingresos reales respecto a 2019, dato que se desprende de su investigación “Una recuperación desigual: masa salarial y distribución del ingreso después de la crisis”, la cual fue discutida en una entrevista en el programa “Nada que perder”(M24).

De Rosa destacó que, aunque el Producto Bruto Interno (PBI) de Uruguay se recuperó rápidamente tras la crisis provocada por la pandemia, esta recuperación ha venido acompañada de un aumento significativo de la desigualdad. "El crecimiento del PBI viene de la mano de un incremento bastante marcado de la desigualdad media", comentó, refiriéndose al aumento del coeficiente de Gini, un indicador que mide la desigualdad de los ingresos. Según los datos presentados por De Rosa, entre 2019 y 2023, el coeficiente de Gini aumentó en más de un punto, un cambio considerable en términos de distribución de ingresos.

El análisis de De Rosa muestra que el crecimiento del ingreso en Uruguay durante este periodo se ha concentrado principalmente en el 5% de la población con mayores ingresos, mientras que el 95% restante ha visto una disminución en sus ingresos reales en comparación con 2019. "El único grupo que realmente es un ganador es el 5% con mayores ingresos", explicó, destacando la profundización de la desigualdad.

Andrea Vigorito complementó este análisis señalando que, en comparación con otros países de la región, Uruguay es uno de los tres países que no han recuperado los niveles de desigualdad previos a la pandemia. "La mayor parte de los países de la región ya volvieron a sus índices de Gini previos a la pandemia", comentó. Además, resaltó que la pobreza en Uruguay tampoco ha regresado a los niveles de 2019, lo que indica que las condiciones de vida han empeorado.

De Rosa también mencionó que el gasto público social en relación al PBI ha disminuido en comparación con 2019, a pesar de que en términos absolutos se gasta más dinero. "El gasto público social en relación al PBI es en realidad más bajo ya en 2023 que lo que era en 2019", señaló, sugiriendo una menor inversión relativa en políticas sociales.