Por STEFANO CASINI
Cuando leí que, a nivel mundial, el promedio de edad en que los niños le piden un celular a sus padres es de 7 años, se me prendió la lamparita. Peor cuando me enteré que, en promedio, a nivel mundial, todas las personas pasan 5 horas diarias frente a su pantalla móvil. Lo primero fue investigar cuales son las contras del uso excesivo del aparatito mágico. El uso excesivo del celular puede causar problemas de salud físicos y mentales y, los padecimientos por el uso excesivo son muy variados. Podemos encontrar problemas de audición, dolor en las manos o tendinitis, dolor en cuello y dolores de cabeza relacionados con las tensiones en el cuello provocados por mala postura a la hora de mirar la pantalla. Con respecto al daño visual hay muchas investigaciones que sostienen que la luz LED directa emitida por los celulares puede dañar la retina. Entre los padecimientos más comunes como consecuencia de usar la luz alta y observar de cerca se encuentran: ojo seco, visión borrosa, y miopía temporal. Para evitar esto se recomienda regular el brillo de la pantalla así como alejar un poco el teléfono y usar zoom para no lastimar tu vista. Quizás los problemas más comunes tienen que ver con la columna y el cuello: una posición forzada puede generar graves consecuencias para el cuello y la espalda. Esto es por el mismo peso de la cabeza, ya que entre más sea su inclinación para mirar el aparato, el peso sobre nuestros hombros aumenta más de lo normal. Hay que mantener la columna recta con las orejas alineadas con los hombros y el celular a la altura de los ojos.
El insomnio es el peor de los problemas, ya que miles de millones de personas, aprovechan esos ratos libres, para ver los whatsapp del día, quieren divertirse con algo de Tik Tok, quieren leer sus mails, agrandando las letras con un simple movimiento de dedos, quieren hacer “fishing” para buscar pareja o se enganchan con una pelea de boxeo. En lugar de utilizar una pantalla grande a distancia y sin agachar la cabeza, se ponen el celular entre las dos manos, con los dedos prontos como caballos de carrera y se rompen los ojos mirando de cerca una luz led. Sin hablar los que ya padecen alguna enfermedad mental o simplemente tienen insomnio crónico: en estos casos es como inhalar más cocaína para mantenerse despierto! La calidad del sueño baja abruptamente cuando la luminosidad de la pantalla hace pensar anuestros cerebros que es de día y que podemos mantenernos más despiertos. Para todo evitar esto se recomienda no usar el celular cuando vamos a dormir y, en caso que sea imprescindible, usarlo disminuyendo el brillo extra en la pantalla. Cuando se usa el celular hay que mantener la vista. Levántalo hasta el nivel de tus ojos. Esto sirve también si trabajas con computadora ya que así evitas el dolor constante en el cuello. Con algunos movimientos del cuello, puedes mejorar el estrés en los músculos y reducir el dolor. Hay que arquear el cuello hacia atrás, adelante y los lados manteniendo los hombros inmóviles. Hayevitar cruzar las piernas cuando estás sentado y que las rodillas se queden por debajo de la altura de las caderas. Usa una almohada para soportar tu espalda baja y media. No mantengas una misma posición por mucho tiempo, si estás sentado párate y camina cada tanto. Hay que mirarse al espejo para enderezar la postura y corregir malos hábitos, el objetivo tiene que ser lograr una línea vertical entre orejas y hombros. También se aconseja programar un recordatorio para asegurarte que no estás en la misma posición durante muchos minutos consecutivos y cuando es momento de dejar de usarlo.
Si sos, como miles de millones, un adicto al celular deberías contestarte estas simples preguntas:
Si la mayoría de las respuestas son positivas, usted podría estar presentando una conducta de compulsividad por el uso de su ‘teléfono celular’…....fácil
En el mundo somos unos 8.100 millones de seres humanos. Saben cuantos celulares se pronostica que haya a finales de 2025? 18.000 millones. ¿No es una monstruosidad?, considerando que, cada uno de nosotros, tiene 3 celulares, dado que, recién nacidos hasta unos 8 años y más ancianos, no los tienen! Bueno, Uruguay no se salva de este desproposito: en 2023, el último censo de celulares daba casi 6.5 millones de líneas activas.
Siempre digo, cuando miro las cifras que son públicas, realmente podemos darnos cuenta de los problemas. Nadie pone en dudas que los celulares modernos resuelven “casi todo”. Tenemos en nuestras manos una herramienta que ya no se le puede llamar teléfono, porque, el hablar está entre las cosas que menos se hace con un celular. Es realmente nuestra computadora portátil que nos resuelve absolutamente todo. ¿Cuantas miles de veces, no recordamos el nombre de un actor, de una iglesia, de una capital o de un Presidente? Desde 2005 la palabra googlear se ha vuelto una de las más pronuciadas diaramente por cada uno de nosotros. Para un viejo periodista como yo que, hasta el siglo pasado, para conseguir un contacto, una entrevista o una noticia, tenía que ir a una biblioteca o que tenía que llamar por TELEFONO, el que inventó Meucci hace siglo y medio, a un colega o amigo que podía tener el contacto que buscaba, hoy, con mi aparatito, puedo resolver cosas en cuestión de segundos, con una precisión relativamente buena. En Uruguay mismo, una encuesta, ha comprobado que, más del 65% de la población se entera de las noticias que circulan en este océano de información, a través de su celular. Sin dudas, este aparatito llegó para quedarse y para desarrollarse aún más. En nosotros está la opción para discriminar entre una herramienta y una adicciòn.