MONTEVIDEO (Uypress/Milton A. Ramírez) - En 1958 el Partido Colorado se fue a dormir festejando un triunfo. En la madrugada ese triunfo viró y fue del Partido Nacional. En 2019 pegó en el palo para que se repitiera un hecho similar. Este triunfo ajustado del Partido Nacional y sus socios de la coalición estuvo en el borde de esas remontadas épicas, esta vez a cargo del Frente Amplio. En 1971 el Partido Colorado le ganó al Partido Nacional por 12.802 votos. En 1994 la diferencia entre el PC y el PN fue de 23.044 votos. En este 2019 la diferencia será de entre 20 y 40 mil votos.
Lo que se fortaleció fue la Democracia y la República. A unos les dolerá haber llegado con el agua al cuello, y a otro haber perdido. Lo que debería subrayarse es un triunfo de todos, es la fortaleza institucional de Uruguay. Es cierto que somos una de las 20 democracias plenas en el mundo. No es menos cierto que esa democracia hay que cuidarla. Todos estamos en un proceso del más sano acostumbramiento democrático, ganar, perder, y aprender y gobernar mejor. El objeto de la política debe ser el bienestar público.
La campaña electoral se realizó en libertad, y en absoluta paz. Los incidentes, que son repudiables, son aislados y menores. Huelgan la comparaciones con la región y con las mismísima Europa o EEUU. Miles de ciudadanos se manifestaron en las calles el pasado 27 de octubre y otros miles se manifestaron este 24 de noviembre. Todo fue en paz. Daniel Martínez llamó a la paz y a no dividir a los uruguayos. Lacalle Pou llamó a la paz y a no dividir a los uruguayos. Aquí hubo madurez democrática y republicana de los líderes. Ni una sombra en la elección. Ni la más mínima duda que esta semana se pasará con la tensión y ansiedad lógica pero que nadie llamará a desbordes y nadie cuestionará el resultado que proclamará la Corte Electoral.
Los comentarios miserables en la redes sociales irán bajando en su frecuencia y cada bot a su cucha. Acá hay muchas pruebas por pasar. La coalición deberá gobernar y tiene un convidado de piedra. El Frente Amplio deberá recomponer fias y procesar las razones de su derrota. Nada es fácil. Pero con libertad, democracia y república, hay condiciones para avanzar en democracia. De eso se trata.